A todos nos gusta comer, y para ello hay que cocinar los alimentos en casi todos los casos, lo podemos hacer con madera, con carbón, con electricidad, y como no, con gas, que es lo que en éste caso nos interesa.
Parece sencillo el conectar una cocina a un recipiente de gas, o a una tubería de gas canalizado, pero siendo fácil, que lo es, hay que cumplir una reglamentación. No es lo mismo una cocina fija, que una cocina móvil. No es lo mismo que el gas se GLP, o gas natural. No es lo mismo la necesidad de instalar una llave de aparato, o no. No es lo mismo poner un regulador de caudal , que no ponerlo. Ahí es donde Narogas pone a su disposición los conocimientos técnicos.
Al igual que el resto de aparatos a gas, necesitan un mantenimiento, tanto la cocina en si, como en todos los elementos que la conectan al suministro de gas, ya que es necesario que se dé una correcta combustión, y evitar las posibles fugas de gas que se producen en las conexiones, llaves, reguladores, y tuberías.